Yo he tenido la GSX-S1000 2016, la antecesora a la GSX-S1000 2021 y he ido a tope con esa moto, tanto en carretera como en circuito. Cierto que a ciertas velocidades debes empezar a buscar la postura más baja para que el casco no te quiera arrancar la cabeza. Hablo siempre yendo arriba del todo.
A velocidades dentro los límites permitidos, ni se nota. Al menos yo no he notado nada con respecto a mi anterior GSX-R1000 2009, que eso sí que no se enteraba ni yendo a lo que pueda dar.
El pecho, como llevas una posición deportiva en esta moto, en el pecho no pega tanto, incluso con viento fuerte y frío, no he notado demasiado el golpe. Sí es cierto que con el tiempo, te acostumbras a que esos días de viento, tiendes a meterte más abajo, a coger una postura mucho más hacia delante, buscando la aerodinámica, como en cualquier otra moto, incluso en las deportivas.
Yo vengo de muchas deportivas y no vuelvo a ellas, porque le he ganado comodidad, algo de peso (no es mucho pero liberas todo el carenado completo), me duelen mucho menos las manos y el cuello (que por eso he cambiado de estilo) y no he echado de menos tener una moto deportiva en cuestión de potencia, teniendo en cuenta que, en mi caso, bajé de 185 a 150CV.
Una cosa que agradezco y mucho, es la maniobrabilidad. Con la GSX-R1000 y antes con la GSX-R600, me veía negro para moverla. Con la GSX-S1000, ya no se sí es "efecto placebo" 😅, pero era comodísima para mover, para aparcar, para "desaparcar", etc...