No soplan vientos favorables para el sector de las dos ruedas en España y la planta gijonesa de Suzuki lo está sufriendo en sus propias carnes más que nadie. Con una reducción de la producción durante los últimos tres años de cerca del 70% y un expediente de regulación de empleo (ERE) flexible que se mantendrá en vigor por lo menos hasta el 31 de marzo de 2012 para toda la plantilla, la factoría gijonesa de la marca nipona capea la crisis como puede y espera que el temporal amaine a lo largo del próximo año. Para ello ha puesto todas sus esperanzas en un lanzamiento, el de su nuevo modelo de motocicleta, un 'scooter' que fabricará la planta gijonesa a partir del segundo trimestre de 2012 y en cuyo diseño ya están trabajando los técnicos y especialistas a pleno rendimiento.

La multinacional japonesa invertirá un millón de euros en el diseño, ejecución y lanzamiento de la nueva motocicleta, que aún no tiene nombre, y cuya ejecución supone, para los responsables de la fábrica de Gijón, «un acto de confianza» de la empresa matriz, según señaló el director, Juan Carlos Andrés. Además, y sobre todo, se espera que la estratégica iniciativa empresarial suponga la recuperación de las ventas en un 30% a partir de mediados del próximo ejercicio.

Hace dos meses la alta dirección de Suzuki en Japón dio el visto bueno definitivo al proyecto del nuevo modelo de motocicleta que los directivos de la planta gijonesa acariciaban desde hacía algún tiempo. La puesta en marcha del proyecto ha llenado de esperanza a una empresa que, con una plantilla de 233 trabajadores, está rodeada desde hace varios meses de una gran incertidumbre.

La crisis económica, las nuevas tendencias y el parón de los mercados de exportación están pasando una dura factura a la planta gijonesa de motocicletas. Con una capacidad para producir 22.000 unidades al año, la fábrica de Gijón trabaja en la actualidad a unos niveles que se sitúan en torno a las 13.000 unidades. Cuando el 80% de la producción está destinada al mercado de la exportación, al europeo, especialmente Italia, y a Estados Unidos, las noticias que llegan de esos países no son precisamente esperanzadoras. En este contexto, la planta gijonesa del gigante de las dos ruedas resiste y mantiene su actividad con un ligero crecimiento de producción en los últimos meses pero, sobre todo, se prepara para cuando se puedan despejar las incertidumbres económicas, tal y como asevera el director de la factoría.

Recuperar mercado

Aprobada la puesta en marcha del nuevo modelo, Juan Carlos Andrés asegura que «ahora se trabaja en el diseño y ya hay avances considerables en el desarrollo de moldes y elementos que configurarán la nueva motocicleta». Si todo marcha según las previsiones de la multinacional, las primeras maquetas del nuevo modelo podrán estar listas a finales de este año y el lanzamiento se producirá en el segundo trimestre. Si la incertidumbre económica se despeja, los responsables de la factoría gijonesa esperan recuperar entre un 25% y un 30% de la producción con el nuevo producto. De las características de la nueva motocicleta se conoce sólo que será un vehículo de entre 125 y 250 centímetros cúbicos, que servirá para modernizar la actual gama y que estará destinado, fundamentalmente, al mercado americano.

Según explica el director de la factoría, la crisis ha modificado las demandas de los clientes y se ha producido un cambio drástico hacia el segmento de las motos de 125 centímetros cúbicos y baratas. Por eso Andrés cree que «tenemos que ser capaces de sacar un vehículo competitivo de estas características que nos permita competir tanto en el mercado nacional como en los mercados de exportación».

Via | http://www.elcomercio.es/v/20110801/economia/suzuki-trabaja-nuevo-scooter-20110801.html

Crisis,crisis al final motos a pedal que inventaran esta vez que sea barato,economico y duradero. :suzukismile: